miércoles, 29 de diciembre de 2010

La Triple Huelga


Navegando por syti.net, web curiosa donde las haya, me he reencontrado con esta destacable iniciativa, y me ha parecido fetén, sobre todo en un momento como ahora en el que informadores y desinformadores te llenan la cabeza de mierda y acabas por no saber ni dónde tienes la mano izquierda. Entre personalidades de la inefable MTV como Billy Corgan denunciando los chemtrails en un concierto (sin descartar a Beck, que hizo lo propio recientemente), teorías metaconspiranoicas, lo menos, que acusan a Wikileaks de ser un falso frente rebelde orquestado por la CIA y el bajón de saber que entre tanto la fascista Ley Sinde no ceja en su empeño por convertir nuestro querido y libre internet en una segunda caja tonta, creo que iniciativas como ésta son de vital importancia. Al menos para darse a conocer, para propagar y hacer llegar a la base de la pirámide como mera opción, porque son conceptos básicos que apuntan a amenazas fehacientes y palpables. Aquí no hay interés oculto ni engaño, los únicos perjudicados son los estratos superiores del sistema, y eso nunca puede ser nocivo.
Además es una opción individual y permanente en el tiempo, que acoge la participación de nuevos individuos en cualquier momento, y no es precisa su intercomunicación; tan sólo conocer el concepto.

"Estas 3 huelgas son de carácter individual. Puede comenzar a participar desde ahora, y es usted mismo quien decide parar, cuando estime que los cambios que usted desee hayan tenido lugar. Es un movimiento de resistencia individual, sin organización centralizada, basado sobre la inteligencia y el libre arbitrio de los participantes.
Las 3 huelgas corresponden a tres niveles de compromiso creciente. Cada nivel es más poderoso, pero pide también mayores esfuerzos que el anterior. Puede usted participar solo a un solo nivel, a dos niveles, o bien a los tres. No esta obligado tampoco a empezar por el primer nivel.
Cada nivel implica 2 objetivos: un objetivo de preservación individual, y un objetivo de lucha contra las empresas, cortando su "aprovisionamiento" en recursos financieros y humanos.
En fin, estas 3 huelgas son mundiales, porque la guerra de las empresas contra los ciudadanos es también una guerra mundial que requiere una reacción y una respuesta mundial."
El primer nivel es la huelga de publicidad. Estoy seguro de que muchos de los que me leen ya casi la realizan de modo iconsciente (cambiar de canal cuando llegan los anuncios) o directamente ni ven la tele. Puede parecer una tontería, y puede parecer que seleccionamos inteligentemente aquellos mensajes publicitarios que de verdad nos interesan, pero no hay que olvidar aquello de las necesidades creadas. Para problemas menores que no soy capaz de identificar, es preferible no conocer las innecesarias soluciones propuestas. Porque éstas convertirán nuestro inapreciable problemilla en un problema hecho y derecho, y con esto juegan los gurús del marketing:

 1  La huelga de la publicidad

"Acción: zapping, cambiar de canal, cortar el sonido o bajar el volumen de la Tele en cuanto la publicidad se difunde. (Cortar el sonido es un medio simple y muy eficaz para reducir completamente los efectos idiotizantes y condicionantes de las publicidades)
Objetivo defensivo: impedir a las empresas y su publicidad de « llenar y ocupar » el espacio de su cerebro y de lograr su trabajo de condicionamiento mental, infantilización y manipulación.
Objetivo ofensivo: privar a las empresas de su poder de incitación al consumo y poner fin a su manipulación de nuestros deseos y de nuestros sueños."

El segundo nivel es consecuencia directa del anterior. A menores necesidades infundadas a través de la publicidad, menor consumo innnecesario, lo que nos lleva  menores necesidades adquisitivas, colocándonos en una posición más ventajosa a la hora de negociar condiciones laborales. No supone ningún misterio que plantearnos un determinado nivel de vida nos hace esclavos de un trabajo que no siempre es el más agradable. Que se lo digan si no a mi jefe, y a todos esos subnormales pluriempleados que sin cinco míseras horas libres al día se consuelan yendo de mierda en mierda a lomos de un carraco a la altura de sus expectativas. Muy interesante lo que se dice acerca del círculo vicioso de la infelicidad provocada por el sistema económico y las compras de compensación:

 2  La huelga del consumo

"Acción: Hacer huelga del shopping (de las compras). Consumir lo estrictamente necesario, boicoteando sistemáticamente los productos de las grandes empresas, en particular, cuando se trata de productos fabricados por esclavos en las fabricas "relocalizadas" en el tercer mundo.
Objetivo defensivo: Limitar sus gastos, intentar ahorrar dinero, y ser lo mas libre posible evitando ser esclavo del sistema económico, rompiendo el circulo vicioso del trabajo que genera stress, que genera compras de compensación, que convierte el asalariado-consumidor aun mas esclavo obligándolo a aceptar cualquier trabajo por cualquier tipo de salario para poder pagar una cantidad enorme de gastos inútiles y de créditos.
Objetivo ofensivo: Prohibir a las empresas de sus recursos económicos, hundiendo sus cifras de negocios y sus utilidades."
 
Por último y en absoluto menos importante, llega el último nivel, el más divertido, ese que muy pocos están dispuestos a ejercer pero que realmente tiene un gran potencial para cambiar el mundo: la Huelga de Natalidad. El concepto es simple y de una lógica aplastante: hasta que no viva en un sistema que me permita disponer de tiempo para educar a mi hijo como a una persona, no tendré hijos. Es más, hasta que no viva en una sociedad que me merezca algún tipo de aprecio y/o respeto, no tendré hijos que tengan que sufrirla. La pamplina de la necesidad biológica no está del todo demostrada (bueno, los intentos conceptivos sí lo son, pero algunas generaciones sabemos cómo sabotearlos) y mucho de lo que tenemos en la cabeza sobre maternidad y paternidad es farfolla divulgativa. El concepto se muestra en la web de un modo más orwelliano:


 3  La huelga de la natalidad

"Acción: Dejar de concebir niños y niñas, hasta que el mundo mejore para poder acogerlos.
Objetivo defensivo: Evitar a nuestros hijos convertirse en esclavos sobre el planeta-basura que no podrá ofrecerles condiciones de vida decentes para el resto de sus existencias. No ceder a la tentación egoísta de "tener » hijos, pero pensar antes en el futuro que les espera.
Objetivo ofensivo: Prohibir a las empresas de sus recursos humanos, cortándoles de su aprovisionamiento de nuevos esclavos."


 Por último, se nos habla de los colores que simbolizan cada uno de los niveles de huelga y de la necesidad de difundir el mensaje y mostrar el disco o discos de color que se esté practicando, lo cual ya veo más cosa de cada uno.
En fin, no se diga que no difundo propuestas para empezar el año!

domingo, 12 de diciembre de 2010

El infinito estómago del rebaño.


(Entiéndase rebaño en su acepción Z acuñada recientemente por Robert Kirkman en no recuerdo qué número de su Walking Dead). ¿A qué viene este arranque sociopato-pesimista del título? Pues a que uno está harto de ver cómo surgen voces documentadas denunciando atropellos inaceptables, pruebas irrefutables que desde internet abofetean a los internautas con verdades como puños y sospechas bien fundadas que devienen en verdades contrastadas, abocadas al completo olvido "cortoplacista", que es uno de los conceptos que mejor se manejan en economía en la última década.

Después de que Wikileaks destapara algunos trapos sucios que, todo hay que reconocerlo, poco había que no se sospechase ya (aunque no debemos negar el valor de tenerlo confirmado y probado), el pueblo es conocedor de hechos bastante flagrantes, como en nuestro caso el encubrimiento del caso Couso o el carácter de encargo americano que reviste la terrorífica Ley Sinde. Tras esto, no sólo el pueblo pasa de preocuparse por saber nada, y denunciar menos, sino que la esfera política, conocedora de esto, se pone chula y se atreve a amenazar y presionar a los delatores con rapidez, antes de que algún zombi se acuerde de lo que era en vida y reaccione de algún modo imprevisto.

 Julian Assage ha sido detenido, entregándose él mismo ante el temor a ser ajusticiado por vías extraoficiales. Las acusaciones, que vienen de Suecia, se pasan por el forro la presunción de inocencia con un despliegue policial de ámbito internacional (soltando los chuchos de la Interpol, nada menos) por un supesto delito de acoso sexual a dos muchachas, una de ellas supuestamente vinculada con la CIA, para más cojones, que no querían denunciar nada al respecto en un principio. ¿Alguna vez vieron a la Interpol dando caza y captura a un sujeto por un delito local de acoso sexual no probado?. Yo tampoco. El mensanje es claro: no importa lo legal que creas que es lo que estás haciendo, con la cúpula política no se mete nadie. Es más, nadie critica ni cuestiona la cúpula política. Y menos con pruebas, claro.

Pero déjenme recordar algo: lo políticos están ahí para representarnos, para servirnos. Están ahí porque nosotros, el pueblo, lo hemos decidido. Cobran lo que cobran porque tienen que tomar decisiones duras y responder por ellas. Y dejarán de estar ahí cuando nosotros lo decidamos. Para que esto sea así y funcione, el pueblo debe saber con total claridad qué demonios están haciendo sus representantes con el poder que se les ha otorgado. Y si hacen algo que no está claro, y más si lo hacen a escondidas, deben de responder ante el Poder Judicial, ése del que parece que todos nos hemos olvidado, pero que es quien en realidad debe decidir tanto sobre Assange como sobre los políticos que lo persiguen con amenazas de muerte. ¿Quién coño se creerán que son para amenazar de muerte a nadie? ¿Y qué hace la gente que no pide cabezas, antorcha en mano?

Ayer precisamente la cosa iba de eso, de gente enfurecida reunida en puntos clave de las principales ciudades españolas, pidiendo explicaciones en los respectivos consulados suecos sobre la detención ilegal de Julian Assange.  Me pasé por la que me correspondía, y pude constatar una afluencia de más de 200 personas, quizá 300, para un evento organizado en dos días del que la mayoría de gente no sabía nada. No está mal. Era un poco lo de siempre, estudiantes de derecho y periodismo con ganas de destacar, antisistema de todas las clases apoyando el tema y algún exaltado con no-se-sabe-qué ideología detrás y muchas ganas de organización. Pero al fin y al cabo todos unidos por una causa que pronto será de todos (y si no, esperen a ver qué trae la reforma del código penal). Algunos de ellos participantes de los ataques de Anonymous a las entidades que sin razón objetiva negaron sus servicios a Wikileaks, demostrando con su miseria moral y servilismo político a quién deben su existencia.

Lo cual da cierta esperanza y, aunque el daño real que Anonymous hace a estos monstruos totalitarios es discreto, es una muestra del poder del pueblo. Si 5.000 personas en todo el mundo fueron capaces de tocar los cojones a gigantes de la talla de VISA o Mastercard, con sólo una coordinación de la mitad de la gente cerebrada y alfabetizada del mundo podríamos lograr un mundo habitable en el que rija la lógica y se de prioridad a lo que de verdad importa. Y sin violencia alguna, que es lo mejor. Sólo se trata de enterarse. Y eso que parece que, a partir del 23 de diciembre, tras la famosa reforma que nos van a colar de tapadillo, los ataques de entradas coordinadas a servidores serán delito. Traquilos, encontraremos la forma.
Pero antes tendremos que averiguar hasta dónde llega el fondo estomacal del rebaño zombificado por los medios.
Y espero hablar de otra cosa en el próximo post, en serio.